
Algunos conductores de la empresa Santa Catalina, en el distrito limeño de San Juan de Lurigancho, han reanudado labores de manera parcial. Uno de los trabajadores indicó a RPP que salen pese a no tener seguridad porque necesitan ingresos económicos.»Hay que salir a las calles a trabajar, ganándose un pan de cada día, porque nosotros vivimos del día a día, es la verdad. [¿Ustedes lo hacen por sus familias?] Lógico, es por la familia. Es por la familia, si no, ¿cómo?», declaró a RPP.Asimismo, añadió que algunos salen con miedo, otros no, pero es decisión de cada trabajador. RPP pudo conocer que las operaciones se han retomado parcialmente luego de que la semana pasada un conductor fuera herido de bala mientras abastecía de combustible su unidad en el mismo distrito de San Juan de Lurigancho. En este local se albergan poco más de 30 unidades y trabajan más de 70 choferes, en donde se guardan los buses, tanto de la línea B y C de dicha empresa, que cubren los trayectos desde San Juan de Lurigancho hacia Villa María del Triunfo. Personal de la Policía Nacional, puntualmente del Escuadrón de Emergencias de Lima Este, resguarda el perímetro del patio-taller, desde donde continúan salidas.Como se recuerda, empresas de transporte como La 50, Huáscar, entre otras, anunciaron la suspensión de sus servicios a partir de hoy, lunes 29 de septiembre, ante la ola de extorsiones que afectan al sector. Martín Ojeda, director de la Cámara Internacional de la Industria del Transporte (CIT), señaló en RPP que la medida busca proteger a los trabajadores.